El vidrio es el material de empaque que por más tiempo ha acompañado al ser humano, de hecho, son más de 3,500 años de brindar sus beneficios a las distintas civilizaciones. Por la capacidad del vidrio al preservar intactos por más tiempo los productos contenidos en él, sigue siendo el material de empaque preferido por la mayoría de los consumidores cuando se habla de calidad, salud y cuidado ambiental.
El mundo vive crisis sin precedentes debido a la pandemia que el COVID-19 ha provocado. Esta crisis vino a descubrir muchas deficiencias estructurales que nuestro sistema como sociedad posee, así como nuestra fragilidad como especie.
Reveló la fragilidad de nuestro sistema económico-financiero, el deficiente sistema de salud que poseemos, no importando el desarrollo social de los países. Puso de manifiesto el impacto ambiental que, como especie, hemos generado sobre el planeta. Que si bien, por un lado, a raíz de la cuarentena vimos un supuesto “respiro”, por otro lado todos hemos sido testigos de los desechos generados, que han venido a afectar gravemente todos los ecosistemas.
Sin embargo, en medio de este difícil panorama, existen pequeñas acciones que de forma individual cada uno de nosotros puede tomar, para generar a partir de cambios en nuestros hábitos de consumo, grandes beneficios al ambiente.
Una de estas acciones, es escoger consumir productos empacados en un material sostenible como el vidrio.
Los envases de vidrio conservan mejor el sabor de lo que contienen, preservan la salud del consumidor, protegen al medio ambiente, y además escogiendo botellas de vidrio retornable, generamos un gran ahorro para nuestro bolsillo.
Por ser el vidrio un material natural y, tan robusto, les permite a sus envases ser reutilizados una y otra vez, sin que eso signifique el deterioro de sus buenas características.
De ahí que puede ser utilizado para producir botellas de vidrio retornable, que son envases diseñados para ser reutilizados en ciclos repetidos de llenado, tapado, consumo y lavado por las empresas embotelladoras.
Consumir productos en botellas de vidrio retornable es un hábito de consumo sostenible, ya que cada envase de vidrio retornables se utiliza en promedio, 40 veces en la región antes de ser reciclado, lo que significa que, durante su vida útil, cada una de ellas puede evitar que 39 desechables lleguen al ambiente.
El concepto de economía circular es un concepto actual, sin embargo, para la industria vidriera no es para nada nuevo, más bien es algo que lleva dentro de su ADN desde siempre.
Por ser el vidrio un material natural, 100% reciclable y reutilizable, su proceso productivo se asemeja a los ciclos que encontramos en la naturaleza, aprovechando los recursos locales, haciendo una utilización eficiente de los mismos, reutilizando los envases a través del vidrio retornable y finalmente aprovechando el material posconsumo de vidrio para poder reciclarlo al 100% y de forma infinita.
Con esto, como los enunciados de la economía circular lo indican, se utiliza eficientemente los recursos, manteniendo el valor de los mismos a lo largo del tiempo y provocando la menor cantidad de desechos durante todo su ciclo de vida.
Desde el punto de vista económico y social, por tener la capacidad de ser utilizados una y otra vez, los envases de vidrio retornable luego de ser adquiridos por las embotelladoras inician un ciclo virtuoso de reutilización, disminuyendo el costo “envase” dentro del producto terminado por mitad con cada ciclo de uso. Esto da como resultado que los productos envasados en botellas de vidrio retornable son hasta un 50% más baratos que lo envasados en botellas desechables, ya que prácticamente el consumidor va a pagar exclusivamente por el producto y no por el envase.
Es importante destacar que cuando el vidrio retornable termina su vida útil, ya sea por haberse roto, o bien que su aspecto exterior se haya visto dañado, el embotellador toma la decisión de retirarlo del mercado. Es allí cuando interviene de nuevo la empresa vidriera, que ha dispuesto sus instalaciones de fabricación para darle un manejo adecuado, convirtiendo las botellas viejas en nuevas botellas de vidrio, que poseen las mismas carácterísticas y está listas para un nuevo ciclo de beneficios.
Una de las grandes ventajas del vidrio como material, es que su reciclaje es un reciclado integral en el que se aprovecha la totalidad de la materia prima, manteniendo todas sus propiedades, dentro de un proceso sin perdidas. Algo muy importante, es que se cierra el ciclo de vida de estos envases como debe hacerse: convirtiendolos en nuevas botellas de vidrio, y no en otro tipo de objetos de menor calidad.
Utilizar de forma exclusiva botellas de vidrio retornable podría reducir hasta un 97%, la generación de desechos provenientes de envases desechables.
El vidrio, material verde por excelencia, tiene un lugar privilegiado dentro de la economía circular. Y, dentro de este sistema, el vidrio retornable juega el papel más relevante ya que puede ser introducido una y otra vez dentro del ciclo.
Con esto se ha ganado su posición como el material de empaque, el envase, más amigable con el ambiente.
¿Quieres contribuir con el ambiente y tu economía? Ahora sabes como, prefiere envases en Vidrio Retornable.
