En el encuentro de Negocios Chile Latam 2023, organizado por ProChile, la agencia de promoción de exportaciones e inversiones del país austral dejó varios avances comerciales en el proceso hacia una estrategia en el mercado farmacéutico latinoamericano que recién despega entre Chile y Guatemala. En este marco, se dio a conocer una noticia que representa un gran logro para estos dos países: la producción y exportación conjunta de medicamentos de grado 4, que no solo se exportarán hacia Estados Unidos, sino que también se utilizarán para mejorar la salud y el bienestar de comunidades guatemaltecas. Esta alianza refleja un esfuerzo conjunto para garantizar el acceso a tratamientos de calidad, marcando un paso significativo en la mejora de la atención médica tanto dentro como fuera de las fronteras de Guatemala.
¿Qué son los medicamentos de grado 4 y por qué son importantes?
Según la clasificación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los medicamentos de grado 4 son aquellos que requieren un alto nivel de tecnología, calidad e innovación para su elaboración, ya que contienen principios activos complejos o biológicos, como anticuerpos monoclonales, vacunas o terapias génicas. Estos medicamentos tienen un gran potencial para tratar enfermedades crónicas, degenerativas o raras, que muchas veces no tienen una solución satisfactoria con los fármacos convencionales.
En el año 2022 se llevó a cabo una misión comercial con laboratorios y empresas chilenas relacionadas con el sector de la salud. Esas conversaciones y contactos se profundizaron aún más en el reciente encuentro de negocios llevado a cabo en Panamá, donde pudimos comprobar el posicionamiento de Chile como proveedor de medicamentos de alto estándar. Esperamos fortalecer estas relaciones y consolidar la presencia de Chile no sólo en Guatemala, sino en el resto de Centroamérica y el Caribe también.
Paso a paso y construyendo alianzas
La producción y exportación conjunta de medicamentos de grado 4 desde Guatemala y Chile es el resultado de un proceso de desarrollo e inversión que inició hace más de una década, con el apoyo del gobierno, la academia y el sector privado de ambos países. El principal impulsor de este proyecto ha sido el Centro de Investigaciones de las Ciencias de la Salud (CICS) de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), que cuenta con laboratorios equipados con tecnología de punta y personal altamente calificado. El CICS ha establecido alianzas estratégicas con empresas farmacéuticas nacionales e internacionales, para desarrollar, producir y comercializar medicamentos biotecnológicos bajo estándares internacionales.
El tema de las regulaciones
Uno de los principales desafíos para exportar medicamentos de grado 4 desde Guatemala y Chile ha sido cumplir con las exigencias regulatorias del mercado estadounidense, que es el más grande y competitivo del mundo. Para ello, se ha contado con el apoyo y la asesoría de ProChile, que ha facilitado el acceso a información, capacitación y contactos comerciales en Estados Unidos.
Asimismo, se ha trabajado en conjunto con la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos, que ha otorgado las autorizaciones correspondientes para ingresar al mercado estadounidense bajo la modalidad de exportación directa. Esto significa que los medicamentos producidos en Guatemala y Chile no requieren de un intermediario o distribuidor en Estados Unidos, sino que pueden ser enviados directamente al cliente final, lo que reduce los costos y los tiempos de entrega.
¿Qué significa este logro para las empresas y la economía guatemalteca y chilena?
En primer lugar, implica un reconocimiento a la calidad, la innovación y la competitividad del sector farmacéutico nacional, que ha demostrado su capacidad para producir medicamentos de alto valor agregado y con estándares internacionales.
En segundo lugar, representa una oportunidad para diversificar y ampliar las exportaciones guatemaltecas y chilenas, que tradicionalmente se han concentrado en productos agrícolas o manufacturados.
En tercer lugar, implica un beneficio para la salud pública nacional e internacional, al ofrecer medicamentos eficaces y accesibles para tratar enfermedades que afectan a millones de personas en el mundo.
La importancia de este suceso a nivel regional es indiscutible. Se trata de un hito histórico para Guatemala y Chile, que se posicionan como referentes regionales en materia de producción y exportación de medicamentos biotecnológicos. Se trata también de un ejemplo de colaboración entre los diferentes actores del sistema nacional de innovación, que han trabajado conjuntamente para impulsar el desarrollo científico y tecnológico del país.
Esta alianza estratégica entre Guatemala y Chile demuestra el potencial que tiene la integración regional para generar beneficios mutuos en materia económica, social y ambiental. Asimismo, evidencia el rol clave que tiene ProChile como facilitador del comercio exterior entre los países latinoamericanos y el mundo.
