La Herpangina es una afección viral que afecta principalmente a niños.
Esta enfermedad suele ser causada por el virus Coxsackie A, se propaga fácilmente entre los niños. Generalmente vemos brotes en guarderías, colegios y entre hermanos, no solamente por la cercanía física, sino por el intercambio de objetos.
Los niños con herpangina presentan:
- Fiebre, la cual como siempre es importante controlar, regularmente no dura más de 48 horas, dolor de garganta.
- Ampollas en la boca.
- Dolor al tragar.
Es importante tomar en cuenta que, puede ser sumamente incómodo, por lo que sobre todo cuando son niños que aún no pueden expresar lo que sienten, se irritan con facilidad y lo manifiestan con llanto.
Al afectarles directamente la garganta y provocar tantas molestias, también los desequilibra en su alimentación, no porque pierdan el apetito, sino por lo tormentoso que se vuelve el proceso de masticar y tragar. Por todo esto se debe estar atento a evitar daños digestivos colaterales, ser muy pacientes con los pequeños, darles opciones de alimentos en estado líquido e idealmente brindárselos con pajilla para que sea menos directo el contacto con la boca y garganta. Algo que les ayuda mucho, es ingerir alimentos fríos, ya que además desinflama y refresca.
La forma de tratar esta molesta enfermedad es reposo, hidratación con suero oral y medicamentos para aliviar el dolor y la fiebre.
Los síntomas generalmente desaparecen en una semana, no es necesario un antibiótico ya que es una enfermedad viral, lo único que hay que hacer es contrarrestar las molestias de los síntomas.
Para prevenirlo es importante lavar bien nuestras manos, evitar el contacto cercano con personas infectadas y mantener un entorno limpio.
Como ya les he manifestado en otras ocasiones, la higiene de los juguetes y áreas en donde los niños se desenvuelven es indispensable para prevenir este tipo de enfermedades, sin caer en los excesos, pues no olviden que para desarrollar defensas de forma natural y fortalecer su sistema inmune, el contacto con su medio ambiente es necesario.
Si sus pequeños manifiestan estos síntomas, lo mejor es consultar de inmediato, recordemos que una enfermedad por sencilla que parezca, no tratada de forma temprana, puede causar serias complicaciones, más aún tomando en cuenta que la boca es un área llena de humedad y la secreción de la saliva tanto al salir como ingresar en el organismo, lleva consigo muchos riesgos.
Como siempre les digo, no es bueno exagerar, pero tampoco confiarse y subestimar una enfermedad, la salud de nuestros niños es un tesoro que debemos proteger y estar vigilantes siempre.