En los últimos años los nuevos estudios e investigaciones acerca de los probióticos y su aporte para mantener el equilibrio de la microbiota, han cobrado mayor interés y demostrado su relación con el bienestar y la salud del ser humano. El Doctor Francisco Guarner Aguilar, Médico Gastroenterólogo y Hepatólogo, nos comparte en esta entrevista información relevante acerca de este tema en el marco del evento “Caremed Masterclass” organizado por Opella..

¿Cómo ayudan los probióticos a restaurar o mantener el equilibrio de la microbiota intestinal?

La microbiota intestinal es un ecosistema de microorganismos que habita en el tracto digestivo y juega un papel fundamental en la salud general. Recientemente, se ha descubierto que no solo influye en la digestión, sino también en otras áreas de nuestra salud, como el desarrollo cerebral. Los probióticos, definidos por la FAO y la OMS en 2001 como microorganismos vivos que, al ser consumidos, brindan beneficios para el anfitrión, se han convertido en un tratamiento clave para restaurar el equilibrio de esta microbiota (Carlos Daniel Zapata Amaya). Estos organismos vivos deben ser cuidadosamente fenotipados y conservados, dado que tienen la capacidad de mutar rápidamente. El uso adecuado de probióticos puede contribuir al mantenimiento de la salud digestiva y, al mismo tiempo, impactar positivamente otras áreas como la salud mental y el sistema inmunológico.

Doctor Francisco Guarner Aguilar

Médico Gastroenterólogo y Hepatólogo

El uso de probióticos va más allá de mejorar la digestión. En la actualidad, se ha demostrado que pueden tener un impacto positivo en diversas enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares e incluso ciertos tipos de cáncer.

Estas bacterias beneficiosas tienen el poder de regular la microbiota intestinal, lo que         contribuye a la

mejora de la función digestiva y la reducción de la inflamación sistémica. A medida que se va comprendiendo mejor su potencial terapéutico, su uso se ha ampliado a otros aspectos de la salud, incluyendo la salud mental y la prevención de enfermedades a largo plazo.

antibióticos y restablecer el equilibrio microbiano en el intestino, lo que ayuda a prevenir la diarrea y otros efectos secundarios del tratamiento antibiótico. Estas cepas se utilizan especialmente en pacientes que reciben tratamientos antibióticos prolongados, como los oncológicos o renales.

La infección por Helicobacter pylori es extremadamente común, afectando al 50% de la población mundial, con una prevalencia aún mayor en personas mayores de 50 años (Carlos Daniel Zapata Amaya). Esta bacteria es una de las principales causas de úlceras gástricas y un factor de riesgo para el cáncer de estómago. Su erradicación suele requerir un tratamiento con antibióticos, pero la inclusión de probióticos, como Bacillus clausii, puede ayudar a mejorar la eficacia del tratamiento y reducir los efectos secundarios. El uso de probióticos también ayuda a restaurar la microbiota intestinal tras el tratamiento antibiótico, mejorando la salud digestiva general.

Los niños adquieren Helicobacter pylori principalmente en los primeros años de vida, cuando su sistema inmune aún se está formando. La transmisión de esta bacteria se da comúnmente de padres a hijos, ya que los pequeños están en contacto cercano con los adultos en su entorno. Dado que la infección por Helicobacter pylori puede tener graves consecuencias a largo plazo, es fundamental añadir un probiótico al tratamiento de erradicación para mejorar la respuesta terapéutica y minimizar los efectos adversos de los antibióticos.

El uso regular de Bacillus clausii y sus 4 cepas (NR, OC, SIN, T) puede tener efectos positivos en la salud general del sistema digestivo. Estas cepa probiótica ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, ya que mejora la actividad de los linfocitos, células clave en la respuesta inmune. Aunque los efectos en la salud digestiva global son aún difíciles de cuantificar con precisión, se ha demostrado que Bacillus clausii con sus 4 cepas, puede promover un equilibrio microbiano saludable en el intestino, lo que tiene implicaciones positivas para la digestión y el bienestar general.

Perfil de nuestro entrevistado

Doctor Francisco Guarner Aguilar

Médico gastroenterólogo y hepatólogo, con amplia trayectoria en investigación científica en enfermedades del aparato digestivo. Doctor en Medicina por la Universidad de Navarra, ha sido fellow en hepatología en el King’s College Hospital y en Wellcome Research Laboratories. Actualmente lidera investigaciones en el CIBEREHD y participa activamente en organismos internacionales sobre microbioma, probióticos y gastroenterología.

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